Si tu meta es comprar un inmueble, una mutuaria es una excelente alternativa a los créditos hipotecarios.
Las mutuarias son instituciones que otorgan préstamos bajo regulación de la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS).
En cambio, los bancos y otras entidades crediticias están supervisados por la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF).
La anterior diferencia supone grandes ventajas para las inversiones inmobiliarias, como ahorro en trámites y flexibilidad para invertir en dos propiedades a la vez.
¿Qué es una mutuaria?
Las mutuarias en Chile, cuyo nombre oficial es Agentes Administradores de Mutuos Hipotecarios Endosables, están a cargo de la aprobación de mutuos.
Este es un tipo de financiamiento que se entrega para adquirir, ampliar, construir o reparar un inmueble, bien sea una vivienda o una propiedad comercial. Otra posibilidad es usar el dinero para refinanciar un crédito.
Como condición, el préstamo no se puede otorgar a más de 40 años ni a un plazo que sea menor a los 12 meses. Además, el monto desembolsado no puede exceder el 80% del valor del inmueble que pensamos adquirir.
El monto se desembolsa en UF (unidades de fomento) o en pesos, según el acuerdo al que lleguemos con la entidad.
¿Cómo funcionan las mutuarias en Chile?
Todas las personas, sean naturales o jurídicas, pueden solicitar un mutuo para inversiones inmobiliarias.
Las condiciones son similares a las de un préstamo de la banca: se nos otorga un crédito y, a cambio, dejamos como garantía el inmueble que vamos a comprar.
Como ocurre con otro tipo de préstamos, será necesario que contratemos un seguro de incendio, el cual deberá cubrir el 100% del valor del inmueble (según lo indicado en la tasación).
Así mismo, se nos pedirá contratar un seguro de desgravamen cuya finalidad es saldar la deuda si fallecemos. De esta manera, nuestra familia no tiene que asumirla.
Una vez que nos hayan aprobado el financiamiento, iremos pagando el mutuo en cuotas o dividendos (considerando el cálculo de los intereses y amortización efectiva). Este pago puede ser anticipado o al vencimiento, dependiendo de lo pactado en el contrato.
¿Cuáles son las ventajas de acudir a las mutuarias?
Hay algunos aspectos diferenciales que hacen de las mutuarias una opción muy interesante:
- Los trámites suelen ser más rápidos, permitiéndonos poner en marcha una inversión en poco tiempo.
- Los costos operaciones son más bajos, lo que representa un ahorro conveniente.
- Los seguros son más asequibles, puesto que estas instituciones están vinculadas al mercado asegurador.
- La deuda no quedará registrada en la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras. Siendo así, es factible solicitar un crédito en una mutuaria y en un banco al mismo tiempo si tenemos la solvencia para hacer una doble inversión. Desde luego, antes de comprometernos hay que evaluar muy bien nuestra capacidad de endeudamiento.
Como nota final, es importante saber que las mutuarias están fiscalizadas y no cualquier institución puede ofrecer estos servicios. A la hora de solicitar un mutuo, el primer filtro es revisar que la entidad sea parte del listado oficial de mutuarias publicado por la CMF (Comisión para el Mercado Financiero).
Estar bien informado es lo que hará la diferencia entre hacer un buen negocio o un mal negocio. Por eso, te invitamos a conocer más sobre qué es una mutuaria, sus características y diferencias en comparación con los créditos de la banca.
